La sala Faktoria d’Arts rizó el rizo a su programación de tributos ofreciendo dos conciertos consagrados a The Beatles, protagonizados por la misma formación y orientados a dos públicos bien diferenciados.
El primero de estos espectáculos, “Beatles for Kids”, supuso el primer concierto orientado a público familiar que se celebró en la sala de La Rasa. Tanto para el local como para a los artistas, la experiencia fue toda una novedad: llevar a una sala de conciertos una propuesta que habitualmente suele presentarse en auditorios o teatros (de hecho el espectáculo ya se desarrolló con gran éxito en el Auditori Municipal de nuestra ciudad en 2013.)
Antes del concierto era de prever que los Abbey Road, una formación de solvencia constrastada, considerada como una de las mejores de tributo a Beatles en el mundo, pasase con nota la prueba. A su favor tenía un dominio impable del repertorio de su banda de referencia, el dinamismo de un espectáculo que conduce hábilmente una animadora, y la selección de un repertorio más que asequible para todo tipo de público, considerada ya por algunos como la música clásica del siglo XX.
Lo más curioso será como Abbey Road tendrá, delante del escenario, a dos tipos de espectadores: los ya conquistados (léase los padres y madres) y aquellos por conquistar, niños y niñas algunos de los cuales jamás han escuchado las canciones de Beatles. Muchos de ellos ni siquiera saben manejar plataformas de streaming, como Spotify, donde desde hace menos de un mes se puede escuchar la discografía completa de la banda pop más brillante de la historia.
Por la noche, los Abbey Road se enfrentaron a un público más habitual, el que venera las canciones legendarias de los británicos casi sin distinción de autor o época, ya sean de Lennon y McCartey, juntos o por separado, o de Harrison…
Llegaron de nuevo a una sala en la que han actuado en otras ocasiones, avalados por un cuarto de siglo de trayectoria y sus más de 1.500 conciertos celebrados. Es probable que uno de los que más recuerden sea el que ofrecieron en The Cavern, las cuatro paredes que vieron nacer al grupo de Liverpool.
Manel Solsona, Manel Mateo, Ferran Corbalán y Carlos Moreno, los miembros de Abbey Road, emulan con la máxima fidelidad los conciertos de los originales, imitando no sólo su música con instrumentos de la época sino también sus peinados (con pelucas de cabello natural) y su vestuario.