La Iglesia católica ya ultima la preparación de la celebración solemne de la Navidad, cuando el cristianismo granó con el nacimiento de Jesús. El Obispado dice que durante las jornadas navideñas se nota una afluencia masiva a las iglesias, sobre todo el día propio de Navidad, el 25 de diciembre. El obispo, Josep Àngel Saiz Meneses, presidirá la misa central en la Catedral e impartirá la bendición apostólica.
Será a las doce del mediodía del próximo viernes. Antes, en la Nochebuena, a las doce, se celebrará en las parroquias la tradicional Missa del Gall, que en la Catedral del Sant Esperit será oficiada por el obispo auxiliar, Salvador Cristau, con una participación especial de jóvenes. Éstos, una media hora antes, realizarán una vigilia de plegaria abierta a todos. La diócesis destaca la importancia que ha adquirido en los últimos años la misa de vigilia dirigida a familias y niños, más pronto, y que coloquialmente es conocida como Missa del Pollet. Se oficia en algunas parroquias, como la de Sant Pere o en la localidad de Matadepera.
Una cita previa, pero asaz relevante, es la colecta de Navidad que tendrá lugar mañana en todas las iglesias y que será coordinada por Càritas. "La dura situación que sufren muchas familias urge a intensificar la ayuda humanitaria", señala el Obispado. La Navidad del 2015 se integra en el Año de la Misericordia, iniciado el 8 de diciembre. El obispo clama por celebrar una pascua "no centrada en el consumismo egoísta". La fiesta de la Sagrada Família se celebrará el 27 de diciembre, y Saiz Meneses presidirá en el templo de la Plaça Vella, al mediodía, la misa del 1 de enero, fiesta de Santa Maria Virgen, y la de la Epifanía del Señor, el 6 de enero, día de los Reyes Magos.