Varias personas, víctimas de sus presuntos engaños, lo habían denunciado e identificado: dijeron haber sido estafadas por ese individuo, que supuestamente les "traspasaba" viviendas ajenas, desocupadas, tras cambiar la cerradura de las puertas. Agentes de paisano de la Policía Municipal le echaron el guante días atrás.Tal picaresca denunciada no es nueva en Terrassa. Hace meses, acaso años, desde la hecatombe del ladrillo, que se desarrollan episodios similares en paralelo con la proliferación de "ocupaciones" de casas y pisos deshabitados.
El modus operandi de esa práctica consiste en forzar puertas de esas viviendas tras comprobar que no están habitadas, sustituir las cerraduras existentes por otras y contactar con personas que buscan un techo. Esos "clientes" pagan una suma de dinero a cambio de ese irregular "traspaso", por las llaves del piso. Las cantidades a abonar por los recién llegados varían, pero en muchos casos se sitúan en torno a los trescientos euros.
Denuncias
No era la primera vez que la policía intervenía e imputaba a un sospechoso de esas prácticas. El cuerpo local recibió hace unas semanas varias denuncias de personas que aseguraban haber sido estafadas por ese individuo, y buscaba al presunto autor de los hechos.
Unidades de paisano de la Policía Municipal dieron con el hombre, de 36 años, el viernes pasado en la calle de Marinel·lo Bosch, y lo arrestaron como presunto responsable de varios delitos: daños, usurpación y estafa. El mismo día lo trasladaron a la comisaría de los mossos. Los agentes, además, le decomisaron un gramo de marihuana, lo que le acarreó una denuncia administrativa.