La relación entre el Ampa del Institut (INS) Can Roca y el director de Serveis Territorials de Ensenyament, Lluís Baulenas, no parece atravesar su mejor momento a tenor de las fuentes consultadas en ambas partes. Como se recordará, la junta de madres y padres de este centro de secundaria hizo público en el mes de noviembre, en dos ocasiones, su profundo malestar por cómo avanza el proyecto de construcción del nuevo centro de secundaria. En sus dos comparecencias, una con el alcalde, y la otra junto con alumnos y representantes de otras entidades, el Ampa criticaba al director de Serveis Territorials de Ensenyament por no cumplir los plazos en el desarrollo y ejecución del proyecto y le pedía una reunión de urgencia (durante la última semana de noviembre). Una reunión en la que además solicitaba que fuera el director quien se desplazara hasta el instituto de Terrassa. Ayer aún no se había producido.
Por su parte, desde Serveis Territorials de Ensenyament han explicado que ellos ya se habían avanzado a la convocatoria en tanto que habían citado a la comunidad educativa de Can Roca a mediados de noviembre per o sólo acudió el equipo directivo y el Ampa no se presentó. El Ampa argumenta que no fue por considerar que no había recibido una petición “oficial” a nombre de la entidad.
Las posturas estaban enfrentadas pero en las últimas horas ha habido gestos para reconducir la situación. Fuentes consultadas explicaron que la semana próxima, tras el puente de la Purísima, puede celebrarse una reunión con el director general de centros del departamento de Ensenyament y el director de Serveis Territorials para explicar la situación del proyecto del nuevo instituto. A la misma serán convocados la dirección y el Ampa como hasta ahora.
La polémica
El Ampa, que se reunió ayer por la tarde pero no se ha podido recabar la información, defiende desde el inicio que el director de Serveis Territorials ha dado fechas de puesta en marcha del nuevo centro que no se cumplen. Y concretaron que les dijo primero en 2014, después en 2016 y hace poco en 2018. Baulenas sostiene, por su parte, que nunca se ha comprometido con una fecha para no crear falsas expectativas. Y ha reiterado una vez más que “los proyectos tienen sus plazos y se cumplen”. Preguntado de nuevo sobre el calendario, indicó que en enero de 2016 hay una reunión con los arquitectos y que es probable que ya se pueda redactar el concurso para licitar la obra”.