La economía española creció el 0,8% entre julio y septiembre en tasa trimestral, el menor incremento en lo que va de año, si bien la referencia interanual de crecimiento, el 3,4%, es la mayor desde que empezó la crisis. La demanda nacional contribuyó en 3,9 puntos al crecimiento anual del PIB en el tercer trimestre, seis décimas más que en el segundo, mientras que la demanda exterior disminuyó su aportación al PIB trimestral en cuatro décimas respecto al trimestre pasado (de -0,1 a -0,5 puntos).
El secretario de Estado de Economía, Íñigo Fernández de Mesa, indicó ayer que la subida del PIB confirma “el buen tono” de la economía y ha reafirmado la previsión del 3,3% para 2015. Fernández de Mesa subrayó que el crecimiento interanual del 3,4% no se veía desde el cuarto trimestre de 2007 y recalcó que duplica al de la zona del euro.
Asimismo, destacó que esta buena evolución de la economía es consecuencia de reformas como la fiscal, de la mejora del mercado laboral y del crecimiento de la demanda interna.
Gasto de los hogares
El gasto en consumo final de los hogares registró un crecimiento anual del 3,5%, seis décimas más que el del segundo trimestre, como consecuencia del comportamiento de los distintos tipos de bienes y de servicios que lo integran. El gasto en consumo final de las Administraciones Públicas aumentó el 3% interanual, nueve décimas superior a la del trimestre precedente.
La formación bruta de capital fijo tuvo un crecimiento del 6,5%, dos décimas más que el del trimestre anterior. La inversión en construcción registró una tasa anual del 5,5%, debido al comportamiento agregado de la inversión en vivienda y de la inversión en otras construcciones.
Dentro de la demanda exterior, las exportaciones de bienes y servicios disminuyeron seis décimas su crecimiento, al pasar del 6,2% al 5,6%, mientras que las importaciones aumentaron su crecimiento hasta el 7,7% frente al 7% anterior.
El empleo de la economía en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo creció en tasa trimestral el 0,7%, dos décimas menos que en el trimestre anterior. En términos anuales, el empleo aumentó el 3,1%, una décima más que en el segundo trimestre, lo que supone un incremento de 512.000 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo en un año. El INE informa de que esta evolución, junto con la variación de la jornada media asociada, da como resultado un incremento de siete décimas en la tasa anual de las horas efectivamente trabajadas, al pasar del 2,6% al 3,3%.
Productividad
El crecimiento de la productividad aparente por hora efectivamente trabajada fue del 0,1%, cuatro décimas inferior a la registrada en el segundo trimestre. La variación anual del coste laboral unitario se situó en el tercer trimestre en el 0,1%, siete décimas por debajo del deflactor implícito del PIB (división del PIB nominal o a precios corrientes entre el PIB real o a precios constantes).
La remuneración de los asalariados aumentó cuatro décimas hasta el 4% su tasa anual, debido al incremento de cinco décimas de la variación del número de asalariados (del 3,2% al 3,7%) y de la caída de una décima de la remuneración media por asalariado (del 0,4% al 0,3%). Estos buenos datos han sido cuestionados por UGT, que aseguró que aunque la economía ha acelerado su crecimiento sigue sin consolidarse y sin trasladarse a los ciudadanos y ha añadido que continúa dependiendo “excesivamente” de la estacionalidad .