Terrassa

“Hay más conciencia de lo que supone ser víctima de maltrato”

La campaña municipal contra la violencia machista celebró ayer en Foment de Terrassa la primera de su jornada dedicada a los profesionales que trabajan en este ámbito. La conferencia marco estuvo a cargo de Antonio Andrés Pueyo, director del Grupo de Estudios Avanzados en Violencia (GEAV) de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), quien remarcó que "la violencia es un grave problema social que genera mucho interés y que se ha convertido en un gran problema de salud pública, motivos por los cuales plantea medidas eficaces". En la exposición, Andrés Pueyo explicó que el fenómeno de la violencia ha cambiado mucho. "Hace veinte o treinta años atrás solo existía la violencia física. En cambio ahora hay de muchos tipos (sexual, física, psicológica…), muchos protagonistas ( pareja, hijos/padres, personas mayores), es variable (diferente intensidad y grado) y prevenible.

Subrayó, sin embargo, que "las mujeres ocupan un lugar destacado en los hechos de maltratos y son, la mayoría de veces, las víctimas de los sucesos". Esta realidad, según el experto, se extiende en las diversas modalidades de la agresión pero especialmente en la relacionada de tipo sexual, de pareja y en el seno de la familia. Ante la pregunta de por qué se da esta realidad, apuntó que el motivo puede deberse a razones psicológicas, sociológicas, culturales pero que no está escrito. Sí constató que los estudios y datos diversos determinan que los actos de violencia tienen a la mujer como víctima más habitual muy por encima del hombre.

Frente a esta situación, el experto de la UAB consideró que una de las líneas de trabajo esenciales es la prevención. "Las muertes por violencia de género no ayudan a comprender el fenómeno. Es violencia extrema, no general. Es por ello que hay que estar alerta a todo lo que sucede en planos inferiores; es decir prestar atención a todas las mujeres que presentan denuncias y que acuden a los servicios municipales, sanitarios, para exponer sus preocupaciones".

Ayuda y prevención
El director del GEAV expuso que "el número de mujeres que se haya en esta situación crece y este incremento es importante porque quiere decir que se ha producido un cambio y hay más conciencia de lo que representa ser víctima del maltrato. Y, es ahí, donde debemos trabajar en programas de ayuda y prevención". Acto seguido reiteró que el fenómeno es complejo y, por tanto, requiere de soluciones complejas. Apostó por trabajar en equipos interdisciplinares donde haya representantes del ámbito de servicios sociales, salud, seguridad policial y judicial pero también desde otras plataformas que puedan influir como, por ejemplo, la escuela. Al respecto se lamentó que muchas campañas de este tipo se inician en primaria pero que después no tienen continuidad en secundaria, una etapa (la adolescencia) en la que sería casi imprescindible. "En los países anglosajones es muy habitual hallar campañas contra la violencia sexual en institutos y en la universidad. Aquí no lo es", se lamentó. Dirigiéndose a los profesionales, el experto consideró que "lo mejor es aplicar la lógica y utilizar recursos y programas que han sido contrastados por su eficacia".

To Top