David Pirri y Sergio Montero, entrenador y secretario técnico del Terrassa FC respectívamente, tienen decididas las posiciones que pretenden reforzar en la plantilla del conjunto egarense con el fin de potenciar un equipo que desde que empezó la Liga se mueve en una línea de notable irregularidad. Los responsables de la parcela técnica quieren incorporar tres futbolistas: uno de banda, un centrocampista y el deseado delantero centro del que se habla desde que arrancó la temporada.
Una de las principales novedades en este libro de ruta de David Pirri y Sergio Montero es la decisión de fichar a un futbolista que actúe en la línea de ataque y se desenvuelva como extremo. El técnico entiende que en estos momentos es preciso aumentar la competencia en dicha demarcación dado que con las últimas lesiones las alternativas en esa zona se ciñen a Óscar y Ángel, dado que Aarón Bueno está actuando como delantero centro debido a la baja de Marc Vilajosana. El Terrassa FC tiene claramente fijado su objetivo en esa posición en una operación que podría ser inminente.
El gran objetivo desde hace semanas sigue siendo un delantero centro que mejore las prestaciones ofensivas de un equipo al que le sigue faltando gol. La lesión de Marc Vilajosana ha acentuado el déficit en dicha demarcación, dado que era el futbolista que más se adaptada a las exigencias de Pirri. El delantero de Ullastrell se lesionó en el partido contra el Masnou y podría estar unos meses fuera del equipo si se confirma la gravedad de su dolencia en la rodilla.
La secretaría técnica maneja en ese puesto varias alternativas, aunque Montero ha señalado que no quiere equivocarse y que esperará a que el mercado empiece a ofrecer oportunidades de buen nivel. Se trata de un fichaje estratégico que puede marcar en buena medida la trayectoria futura del equipo egarense.
Más músculo
El tercer fichaje sería el de un centrocampista de corte defensivo. En esa posición las exigencias de Pirri son claras, dado que el entrenador ha pedido la incorporación del veterano Fernando Núñez, que lleva unos meses entrenando con el primer equipo y se ajusta al coste económico disponible. Sin embargo, los deseos del entrenador chocan con una visión distinta de los responsables de la junta directiva, que siguen sin dar luz verde a la operación.
En todo caso, el club parece decidido a no dar bajas aún en el caso de producirse esos tres fichajes. El alto número de lesionados con que cuenta en estos momentos la plantilla hace que Pirri vaya con los efectivos justos y no se quiere reducir el número de jugadores para evitar que se repita la situación. Este domingo, por ejemplo, estuvo en el banquillo un Javi González aún no recuperado plenamente de su lesión.