Las escuelas de ingeniería de Terrassa han sido durante más de un siglo motivo de orgullo para los terrassenses. La vieja Escola Industrial, el embrión de la gran Terrassa universitaria, la actual Escola d’Enginyeria de Terrassa, es el ejemplo paradigmático de hacer de la necesidad virtud. Los industriales de la ciudad necesitaban profesionales para sus empresas e impulsaron el centro de formación que debía solucionar su problema. Dos años después nació la escuela de ingenieros superiores que en 1962 estrenó edificio propio.
Mientras se mantuvo la diferenciación entre los ingenieros técnicos y los superiores, ambas escuelas mantuvieron su razón de ser, pero la unificación de los estudios en grados como consecuencia de la aplicación del Plan de bolonia hizo que la pervivencia de los dos centros fuese ciertamente una anomalía. La duplicidad de estructuras no tenía demasiado sentido.
La unificación de planes de estudio debía acelerar el proceso junto a la crisis económica y probablemente se ha alargado más de lo que la propia UPC hubiese deseado. En todo caso, la creación de un único centro que se llamará Escola Superior d’Enginyeries Industrials, Aerospacial i Audiovisual de Terrassa (Eseiaat) se convertirá en la gran escuela de ingenieros, referente en el mapa universitario catalán con casi cinco mil alumnos, del que la ciudad se seguirá sintiendo orgullosa. No se trata del fin de nada, sino de la continuación natural de un proceso lógico. Como enseña de lo que fue el precedente de este nuevo gran centro siempre quedará el viejo edificio de Muncunill, tan característico y siempre tan presente en el imaginario popular terrassense.
Dimisión
La constitución de Podemos en Terrassa no fue plácida y llevó al enfrentamiento directo a dos grupos que pugnaban por controlar la dirección de la nueva formación. La dimisión de su líder, Anibal Garzón, podría interpretarse como un síntoma precisamente por la insistencia en matizar que no corresponde a distanciamientos políticos, sino a cuestiones personales. Tan interesante es seguir la confluencia de los partidos de izquierda en Terrassa como sus consecuencias en las formaciones de referencia.