El mes de octubre en Terrassa es sinónimo del Mes de las Personas Mayores. Es por ello que desde el Ayuntamiento, principalmente, así como de otras instituciones y entidades se programan una serie de actividades para visualizar el colectivo de la gente de más edad. Un colectivo que, en función de sus circunstancias, está más o menos activo. De lo que no hay duda es que sus años vividos -su experiencia- representan una aportación valiosa para las presentes y futuras generaciones y para la sociedad.
Con motivo del Día Internacional de las Personas Mayores (1 de octubre, ayer), Creu Roja alerta que una de las problemáticas derivadas del progresivo envejecimiento de la población tiene que ver con la tendencia al aumento del sentimiento de soledad entre las personas mayores. Diversos estudios muestran que este fenómeno puede ser general o agravar problemas de salud física y mental así como limitar la autonomía y el bienestar de las personas mayores.
En este contexto, la entidad social ha dado a conocer los datos de una encuesta realizada en la ciudad sobre la vejez para explorar opiniones acerca de varios aspectos sobre el grado de conocimiento y percepción sobre esta etapa vital. De los resultados del estudio se concluye que la salud (especialmente el deterioro físico y mental) y la soledad es lo que más preocupa en esta etapa de la vida.
La edad y otros factores
Entrando en detalles, el estudio revela otros datos relativos a la percepción de cuándo una persona es mayor. Así, el 54 por ciento de las personas entrevistadas sitúa esta frontera a partir de los 65 años y un 39 por ciento de éstos especifica que es a partir de los 70 años. Creu Roja considera estos resultados de interesantes en la medida que constatan que se está produciendo un cambio en la definición cronológica de la vejez, de forma que la línea que marca el paso de la edad adulta a la vejez se está retrasando notablemente en los últimos años. La edad es un indicador determinante pero no el único. Para un 35 por ciento de las personas consultadas también influyen aspectos como el estado físico y/o psíquico, el estado de salud o la mentalidad y el carácter.
La encuesta también ha preguntado que es lo qué preocupa más sobre la vejez. Aquí, un 42 por ciento de los consultados coincide en señalar el deterioro físico. También inquieta por el siguiente orden la dependencia de otras personas (que guarda relación con el deterioro físico y cognitivo); el descenso del poder adquisitivo; el deterioro intelectual y la pérdida de la red social , la falta de obligaciones y hábitos.
En cuanto al fenómeno de la soledad, el sondeo destaca que nueve de cada diez personas considera que la soledad no deseada entre las personas mayores es muy o bastante importante. En este apartado, además, un 47 por ciento de los ciudadanos consultados asegura conocer alguna o más personas en esta situación en su propio barrio. De ahí que se considera que, además de los familiares más directos, los vecinos pueden ser muy activos a la hora de detectar y comunicar situaciones vulnerables. Creu Roja indica aquí que las respuestas obtenidas confluyen en vasos comunicantes por lo que se puede constatar que los dos motivos generales de preocupación son la salud y la soledad.
Prueba piloto
El estudio realizado se enmarca en el programa “Siempre Acompañados” impulsado la Obra Social “la Caixa”, Creu Roja y el Ayuntamiento, que tiene el objetivo de prevenir y paliar los problemas derivados de la soledad no deseada entre las personas mayores. Este programa se ha puesto en marcha como prueba piloto en ciudades como Terrassa, Tortosa y Girona. En el caso de nuestra ciudad se eligió el distrito IV y en particular en los barrios de La Maurina, Ca N’ Aurell y La Cogullada, donde hay censadas un total de 1.364 personas mayores de 65 años que viven solas. Desde Creu Roja, Sònia Hernández, responsable autonómica de la iniciativa, explica que hasta la fecha se ha impulsado la creación de una red entre los diversos agentes, recursos y entidades del territorio que trabajan en el ámbito de las personas de más edad. Asimismo, se inició una campaña de difusión sensibilización y se abrió una línea de atención de teléfono gratuita 900 365 222, que funciona las 24 horas del día para las personas mayores y que la ciudadanía en genera puede participar, colaborar a través del voluntario dar visibilidad a este fenómeno. Asimismo ahora, durante este Mes de las Personas Mayores, se impulsan una serie de actividades para seguir trabajando en este campo (ver recuadro en la parte inferior). Hernández remarca que para abordar la soledad no deseada en las personas mayores es necesario contar con todos los canales posibles. “La red constituida es muy amplia, va desde los servicios sociales, centros sociosanitarios, casals, asociaciones de vecinos y comerciantes, Mossos y también voluntarios. El objetivo es que haya personas que están en primera línea de su actividad para con la comunidad porque estas pueden detectar los casos y ponerlos en conocimiento. De este modo se puede diseñar qué tipo de acción es necesaria, preventiva o de intervención. Lo ideal es que las personas que viven en esta soledad no deseada puedan salir de la misma estableciendo vínculos”.