La Seguridad Social registró un déficit de 5.352,8 millones de euros en los ocho primeros meses del año, cifra que equivale al 0,49% del PIB, según informó ayer en una nota el Ministerio de Empleo y Seguridad Social. Este saldo negativo registrado en los ocho primeros meses del ejercicio es resultado de unos ingresos no financieros de 84.799,5 millones de euros, que aumentaron un 3,7%, frente a unos gastos de 90.152,3 millones de euros, un 6,5% más en relación al mismo periodo de 2014.
En términos de caja, la recaudación por cotizaciones sociales alcanzó los 65.830 millones de euros, con un incremento del 1,3% respecto al mismo periodo de 2014. Por su parte, los pagos efectivamente realizados para cubrir las prestaciones contributivas se incrementaron hasta agosto un 3,44%, hasta los 78.804 millones de euros. Empleo ha resaltado que hace un año la recaudación líquida por cuotas crecía al 1,1%, por debajo del 1,3% registrado hasta agosto del presente ejercicio, en tanto que los pagos avanzan ahora prácticamente al mismo ritmo que en 2014 (3,44% frente a 3,42%). Las cotizaciones sociales, contabilizadas como derechos reconocidos, alcanzaron los 66.879 millones de euros hasta agosto, casi un 0,8% más que en igual periodo de 2014, gracias al aumento de las cotizaciones de los ocupados en un 2,2%.