Las retenciones de tráfico aumentaron un 66 % en Barcelona en un año, lo que la convierte en la ciudad europea donde más subió este porcentaje, según el informe anual "Traffic Scorecard" de Inrix, hecho público hoy.
En 2013, los conductores barceloneses pasaron una media de 15 horas metidos en embotellamientos, mientras que, en 2014, esta cifra se elevó a 25, detalla el estudio de la proveedora norteamericana de servicios de información de tráfico.
Madrid fue la segunda ciudad española con más retenciones, con un total de 22 horas anuales de embotellamiento por conductor, seguida de Sevilla con 18, Bilbao con 16, Zaragoza con 12 y Valencia con 11.
Diecisiete horas en atascos
España fue el undécimo país más congestionado de Europa, donde los conductores pasaron una media de 17 horas en atascos a lo largo del año, según el informe.
Las carreteras españolas con más retenciones de vehículos fueron la B-10 de Barcelona y la M-40 de Madrid.
A nivel europeo, Londres figura como la capital con más atascos, con una media de 96 horas pasadas en retenciones por sus conductores a lo largo de 2014.
Bruselas fue, por su parte, la segunda ciudad del continente con más aglomeraciones de vehículos, dado que los conductores perdieron una media de 74 horas en sus calles.
De las 94 ciudades sometidas a estudio, el 48 % registró un aumento en la densidad del tráfico de 2013 a 2014.
Por países, Bélgica fue donde los usuarios sufrieron más embotellamientos durante el año pasado, con una media de 51 horas en atascos.
A Bélgica le siguen los Países Bajos, con 41 horas, y Alemania, con 39, indica el informe.
Según el estudio de Inrix, los países en los que la tasa de retenciones de tráfico aumentó son aquellos con una mejor situación económica.
En cambio, en los países con bajos niveles de crecimiento y altas tasas de empleo, los embotellamientos disminuyeron de 2013 a 2014, señala el texto.
De los trece países europeos monitorizados, el 53 % registró una intensificación de las retenciones de tráfico de 2013 a 2014.