Las polémicas en torno al IV Cinturó no paran de crecer. Si a mediados de mes fueron sobretodo los empresarios los que se indignaron por el atraso en la finalización de las obras -se alarga de 2018 a finales del 2019 o principios del 2020- ahora son los miembros de la Campanya contra el Quart Cinturó (CCQC) los que se han puesto sobre aviso. Y es que los Presupuestos Generales del Estado prevén hacer un estudio sobre el tramo Terrassa-Granollers pero que solo contemple el recorrido que va desde la cocapital vallesana hasta Caldes de Monbui.
Algo que para CCQC es una manera de alterar los resultados, pues con la subfragmentación se simula que el impacto medioambiental de la infraestructura es menor del que es en realidad. De hecho, tal y como recuerda Toni Altaió, portavoz de la ADENC (Associació per la Defensa i l’Estudi de la Natura), la unión entre Caldes de Montbui y Granollers no aparece en las cuentas del Estado.
Pero Altaió denuncia que los estudios no pueden ser fragmentados a voluntad y que, si se hace, la legislación lo puede penalizar. En este sentido, el portavoz de ADENC entiende ésta maniobra como una treta para que haya menos movilizaciones en la calle debido al maquillaje de los resultados sobre el impacto ambiental.
Del millón de euros que está previsto invertir en el tramo entre Terrassa y Granollers durante el 2016, una parte se debe destinar a este informe. Un informe que viene a actualizar el que se realizó en 2010, que fue caducando debido a la falta de inversión pero que contemplaba todo el trazado de este trecho. De hecho fue el mismo Ministerio de Medio Ambiente quien, en el año 2013, archivó el expediente de evaluación ambiental del tan citado tramo tras admitir que la tramitación del IV Cinturó había caducado.
Denuncias contra el Estado
Fomento prevé destinar un total de 3,8 millones de euros a este trazado. Así, tras el millón del próximo año, invertirá 1,8 millones en el 2017 y un millón más en 2018.
La Campanya ya ha previsto diferentes acciones en el marco jurisdiccional por si se inicia el estudio entre Terrassa y Granollers. La entidad afirma que presentaría un contencioso administrativo dentro del Estado y que incluso recurriría a la jurisdicción europea, presentando una denuncia ante la Comisión.
Así lo aseveró Altaió en declaraciones a los medios de comunicación, señalando que “hay suficiente jurisprudencia para pensar que el caso se resolvería en contra del estado español”.
Disminuir el impacto
La Campanya contra el Quart Cinturó se inició hace 24 años (en 1991) en la ciudad de Sabadell. Actualmente ya cuenta con 279 entidades del Vallès Occidental, el Vallès Oriental, el Baix Llobregat y el Penedès de diversos ámbitos, desde el ecológico al vecinal pasando por los estudiantiles o sociales, entre otros.
Todas estas entidades piden a Fomento y a la Generalitat que se retire definitivamente el proyecto tanto del Pla director d’infraestructures como del de Carreteres de Catalunya. Además, exigen una revisión substancial del actual Pla territorial general de Catalunya así como la elaboración de un estudio técnico “serio” sobre las diferentes opciones al IV Cinturó.
En este sentido, la CCQC ha presentado sus alternativas para no construir esta autovía que considera que “no es sostenible para nuestra comarcas” y añade que su finalidad con esta acción es “preservar y consolidar una serie de espacios agrícolas y forestales conectados entre sí y con las cordilleras Litoral y Prelitoral”. La entidad también cree que para eliminar el impacto ambiental en el territorio seria necesario cambiar el actual sistema de transporte, basado en el automóvil, hacia uno basado en el ferrocarril, “lo que ahorraría energía (…) y evitaría el destripamiento y especulación sobre el territorio”.
