El 44% de las pequeñas y medianas empresas españolas tiene facturas pendientes de cobro que superan el plazo legal (60 días), según el Boletín de Morosidad y Financiación Empresarial elaborado por Cepyme y la Dirección General de Industria y de la Pyme, publicado ayer pero que recoge datos del primer trimestre del año.
Dentro de este 44%, el 11% de las pymes asegura que esa morosidad afecta a más del 10% de su facturación total. Otro 13,5% de las pequeñas y medianas que cuenta con facturas impagadas asegura que éstas suponen más de un 5% de su cifra de ventas.
"Esto supone que casi un 9% de las empresas tengan más de un 10% de su facturación en riesgo de impago", destaca el boletín, que advierte que "de materializarse, ese riesgo de impagos puede abocar a muchas empresas al cese de su actividad, con los consiguientes costes para la sociedad derivados del cierre de empresas". No obstante, y pese a esos datos, el informe concluye que los indicadores de morosidad empresarial han experimentado una "leve mejora" respecto al último trimestre del año pasado, y "ha mejorado notablemente con respecto al publicado en junio de 2014, cuando el 24% de las empresas estimaba que más del 10% de su facturación nunca llegaría a cobrarse". En concreto, el plazo medio de pago se ha reducido en más de dos días, pasando de 81,2 días del cuarto trimestre de 2014 a los 79,5 días del primer trimestre de este año. Además, el porcentaje de crédito comercial en mora se ha reducido dos puntos porcentuales hasta quedar por debajo del 69% del total de facturas pendientes de cobro.