"El señor domingo y Mrs. Monday" es el título del disco de debut de Rossvelvet, la formación que comparten la diseñadora egarense Olga Boronat y el músico Moisés Cuadrado. Juntos trabajan desde el año 2009, después de haberse conocido en el seno de la ya disuelta formación egarense Madame Curie.
Al principio comenzaron a trabajar solos (aunque inicialmente fueron tres) buscando simplificar el trabajo compositivo. "Tuvimos muy buen feeling, fue algo muy intuitivo", recuerda la cantante de la formación. "El resultado nos gustó, y a partir de ahí empezamos a buscar a los diferentes músicos y herramientas para empezar a hacerlo más grande."
Su puesta de largo tuvo lugar en la segunda edición del Surface Festival, un concurso de bandas a nivel nacional celebrado en 2011 en el que lograron el segundo premio nacional y la décima posición en la final Internacional del mismo festival celebrada en noviembre de aquel mismo año, en Londres. En aquella final fueron conocidos como "los latinos; éramos los únicos que no cantábamos en inglés. Además la final fue muy rockera, casi heavy, mientras que nosotros representábamos una propuesta pop. Pero a la gente le gustó."
El premio les permitió grabar dos temas en los estudios Nòmada 57, donde apreciaron positivamente la propuesta del grupo y les abrieron las puertas del espacio televisivo "Ritmes", de TV3. A partir de esas experiencias, el dúo se fue curtiendo y ofreciendo mayormente conciertos acústicos, hasta que llegó el momento de impulsar el proyecto de grabación de su disco de debut.
Atendiendo a las circunstancias actuales, Rossvelvet optó por la autofinanciación y lanzó una campaña de crowdfunding en la que lograron sus objetivos recaudatorios.
Esfuerzo y satisfacción
La campaña se lanzó en 2013, pero el disco no vio la luz hasta dos años más tarde: "Fue un proceso largo. Todos los que participaban trabajaban al mismo tiempo, y todo se acabó alargando… Queríamos estar muy satisfechos del resultado." Y así ha sido; pese a ser un proyecto surgido de la escena independiente, el trabajo destila una calidad propia del mercado más comercial. Ellos mismos defienden su propuesta como "ilusión pop y sencillez indie."
Rossvelvet ha apostado por recuperar el pop de los 80, "pero renovándolo", con unas letras que "son muy importantes para nosotros." El ejemplar físico del disco está cuidado hasta el último detalle, un trabajo con el que han querido convertirlo en una pequeña obra de arte. El libreto con las letras contiene además notas a pie de página en las que han querido explicar el por qué de sus canciones.
Ha sido "una gran inversión económica y de tiempo", pero afirman estar muy contentos con el resultado. El disco apareció en marzo pasado, y desde entonces lo han presentado en espacios como el Mutuo Centro de Arte, el FNAC Les Arenes o el Marula Café, y están pendientes de confirmar nuevas fechas, incluida Terrassa.