La Federació d’Associacions de Veïns de Terrassa (FAVT), ha roto su silencio sobre el derecho a decidir y lo ha hecho condicionando su incorporación al Pacte Terrassenc pel Dret a Decidir a que el acuerdo "incluya todos los derechos sociales y siempre y cuando este derecho a decidir no reoriente el voto a ninguna postura concreta".
La entidad supravecinal forma parte de la Confavc, que agrupa a todas las entidades vecinales catalanas, y que a su vez forma parte del Pacte Nacional pel Dret a Decidir desde el 26 de junio de 2013. Pese a ello, la FAVT no se había pronunciado al respecto hasta ahora ateniendo a "la diversidad de sensibilidades que confluyen en el movimiento vecinal".
Calidad democrática
En un comunicado público, la FAVT muestra su adhesión a las líneas de trabajo adoptadas por la Confavc y que se centran en tres aspectos.
Defiende el derecho a decidir "como un derecho político indiscutible", al entender que forma parte de los derechos esenciales y supone un instrumento de calidad democrática.
Recuerda que el derecho a decidir debe incorporar todos los derechos sociales y no solo los identitarios. En este sentido, aboga por las políticas sociales como requisito en ámbitos como "el trabajo, la educación, la sanidad, los servicios públicos y la cohesión social".
En último término, la Federació d’AVV apoya la reivindicación de la Confavc de que el derecho a decidir tenga como objetivo final "una consulta popular sin factores que puedan condicionar el voto de los ciudadanos".
La federación insiste en el carácter plural del movimiento vecinal y la importancia de que, en cualquier consulta, "no se condicione ni dirija los pensamientos ni los sentimientos de vecinos y vecinas", afirma la entidad en su última declaración pública.