El Rey recibió ayer al presidente de la Generalitat, Artur Mas, quien precisó sonriente que acudía al Palacio de la Zarzuela “en son de paz” antes de encontrarse con don Felipe en una reunión que duró una hora y veinte minutos y en la que tuvo ocasión de exponerle sus planes soberanistas. Mas, que llegó a la Zarzuela unos quince minutos antes de mediodía, la hora a la que había sido citado, se mostró muy sonriente ante los numerosos informadores presentes en el Salón de Audiencias y, mientras posaba junto al Rey para los medios gráficos, dirigió algunas palabras en tono distendido a don Felipe, que atendía sus comentarios con gestos amables pero serios.
Antes de que el Monarca entrara en la sala y, con gesto también serio, estrechara cordialmente la mano de su invitado, Mas saludó a la prensa y, ante el comentario de una informadora, recordó que “hacía tiempo” que no acudía a la Zarzuela, tras lo que la periodista le preguntó si se veía dentro de poco como jefe de Estado en visita oficial. Mas abrió entonces los brazos en un gesto que indicaba claramente que no iba a contestar, reforzado con la conocida expresión en inglés “No comment”, y añadió sonriente: “Vengo en son de paz”, mientras un ayudante de campo anunciaba ya la entrada del Rey en el Salón de Audiencias.
Un portavoz de la Generalitat presente en el salón de audiencias confirmó que Mas no hará declaraciones sobre el contenido de la entrevista y precisó que, en contra de lo anunciado inicialmente por un error del que se responsabilizó personalmente, el Govern tampoco emitirá comunicado alguno sobre la reunión.
En la audiencia, el presidente catalán tuvo oportunidad de abordar con el Rey asuntos de la actualidad del proceso soberanista como la querella de la Fiscalía contra él por la consulta del 9N o la lista independentista unitaria para el 27S que acordaron CDC y ERC con el aval de Asamblea Nacional Catalana (ANC), Omnium Cultural y la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI).
Apenas tres días antes de esta reunión con Felipe VI se hizo público que el exeurodiputado de ICV Raül Romeva será quien encabece la lista en la circunscripción de Barcelona y que Mas ocupará la cuarta posición, aunque mantendría la presidencia de la Generalitat si esta candidatura ganara las elecciones.
Además, el pacto entre CDC y ERC establece que el Gobierno que se constituyera tras una eventual victoria de la lista unitaria podría proclamar la independencia de Cataluña a partir del sexto mes tras los comicios de septiembre.
El jefe del Ejecutivo catalán, noveno presidente autonómico recibido en audiencia por Felipe VI, acudió por última vez a la Zarzuela el 31 de enero de 2013 para encontrarse con el Rey Juan Carlos, una reunión sobre la que habló aquel mismo día a su regreso a Barcelona para precisar que en ella había querido dar al Monarca una “señal clara de la voluntad de diálogo y de entendimiento”.
Don Felipe y Mas coincidieron por última vez el 25 de junio con motivo de la ceremonia de entrega de premios de la Fundación Princesa de Girona (FPdGi), en la que el Rey animó a los “ciudadanos de Cataluña y de toda España” a avanzar juntos, con “serenidad y determinación” y “a pesar de las dificultades”, por el camino de la “unidad” y el “objetivo común” de construir una sociedad mejor.