El Senado aprobó ayer de forma definitiva y sin modificaciones la Ley de Segunda Oportunidad, que entre otras medidas incluye disposiciones para exonerar deudas a particulares y pymes o la extensión de la deducción de 1.200 euros anuales, el llamado "cheque familiar".
La Comisión de Economía del Senado, con competencia legislativa plena, rechazó tres vetos y 218 enmiendas de la oposición y aprobó el texto legal con los votos del PP, por lo que el proyecto de ley, que convalida un real decreto de febrero en vigor, ha quedado definitivamente aprobado al no haberse modificado durante el trámite en la cámara alta.
La norma establece una segunda oportunidad en el ámbito concursal para deudores de buena fe con cargas, que incluye a los particulares, retira las cláusulas suelo a colectivos vulnerables y apoya las bonificaciones a familias y autónomos, entre otras medidas.
El senador del PP Vicente Aroca dijo que el objetivo es ofrecer nuevas oportunidades a las personas "atrapadas por la crisis" que han tenido una mala experiencia personal o profesional, por lo que opinó que es un texto "bueno y útil" ya que ayudará a continuar con la senda de recuperación.
Señaló que pese a dar oportunidades a los deudores de buena fe, también se refiere a los acreedores, por lo que trata de conciliar los intereses de unos y otros para no dañar la cultura del pago y la cultura empresarial.
Desde la oposición, el senador José A. Manchado del PSOE aseguró que se trata de "una oportunidad perdida" para recuperar a las personas que lo han perdido todo y que merecen una solución por cuestiones de "justicia social", que esta norma no contempla.
Añadió que es una ley "insuficiente", no homologable a las normas del mismo ámbito de otros países, y criticó que no protege el derecho de acceso a la vivienda.