La detuvieron los Mossos d’Esquadra el viernes, poco después del fuego que arrasó la vivienda de Montserrat en la que vivía su expareja. La mujer acusada de incendiar el piso ha ingresado en prisión tras pasar a disposición judicial el pasado fin de semana.
En el piso, un tercero, ocupado, habitaba un hombre. Según señalaron fuentes próximas al caso, el morador estaba sujeto a una orden judicial de alejamiento de su expareja pero fue ella, una mujer de origen colombiano, la que el viernes de madrugada se presentó en el domicilio. Iba preparada. Llevaba maletas. Parecía dispuesta a quedarse allí.
El hombre, según las mismas fuentes, no quiso problemas extra y salió del piso, y llamó a la policía. Minutos después llegaron unos mossos d’esquadra. Y allí se encontraban los policías, hablando con el hombre, cuando la humareda se espesó a su alrededor. La vivienda era pasto de las llamas.
Desalojo
Faltaban doce minutos para las dos de la madrugada cuando los bomberos recibieron la alerta. Los vecinos, unos cincuenta, fueron desalojados del bloque, un trabajo en el que descolló un agente de los mossos que debió ser atendido después por inhalación de humo. Las llamas que devoraban la vivienda se elevaban desde las ventanas del domicilio, por la fachada.
Los bomberos, que desplazaron a cuatro dotaciones, acabaron su intervención dos horas después de la alerta. Los servicios de emergencias abandonaron Montserrat poco a poco. En un coche patrulla de los Mossos d’Esquadra viajaba una mujer, acusada de haber generado adrede el incendio. Según testigos, ya había amenazado varias veces con pegar fuego al piso.