Martí Gimeno, bachiller de la Escola Mare de Déu del Carmel (Karmel), apenas pudo celebrar con sus amigos y familiares la buena nota -un 9- lograda en la fase general de las PAU porque al día siguiente tenía que preparar las maletas para viajar a Israel. Martí, que será uno de los doce egarenses distinguidos por la Generalitat por su resultado en la selectividad, se ha desplazado hasta el aquel país para hacer una estancia científica en el Institute Weizmann. Allí se incorporará a un grupo de científicos para trabajar en un proyecto de dinámica de fluidos. Horas antes de este viaje dijo sentirse muy ilusionado “por este cúmulo de oportunidades que me da el programa ‘Joves i Ciència’ de la Fundació Catalunya (sobre estas líneas recogiendo el premio). “Fui seleccionado hace tres años -explicó- y cada fase ha sido un estímulo. El primer año estuve en el complejo científico de las Valls d’ Àneu, el pasado en el Institut de Cièncias Fotòniques de Catalunya y ahora en este campus de Ciencia y Tecnología de Israel, en la ciudad de Rehovot. Estoy muy agradecido porque es una gran experiencia estar en contacto directo con investigadores de alto nivel en una materia que te gusta”. Martí cuenta que quiere estudiar el grado de Ingeniería Física en la UPC y que en el futuro quiere ejercer como científico. No será el primer ingeniero en casa. Su hermana, mayor que él, estudia Ingeniería de la Energía en la UPC y su padre es ingeniero. Entre sus aficiones destaca la animación en 3D por ordenador (su madre es ilustradora) y el tenis
