Convergencia Democrática de Catalunya (CDC) y Unió Democrática de Catalunya (UDC) mantendrán de forma “institucional” un único grupo parlamentario en el Congreso de los Diputados. Sin embargo, cambiará de nombre, pero se dividirán en dos subgrupos, cada uno con sus portavoces y que actuarán con total autonomía e independencia.
Esta ha sido la fórmula acordada por el hasta ahora grupo catalán de Convergencia i Unió, que pasará a denominarse Grupo catalán de Convergencia y de Unió, para reflejar en el ámbito parlamentario nacional la ruptura de la coalición nacionalista en Catalunya. Una fórmula ideada para evitar que los diputados pasaran al Grupo Mixto.
Aunque formalmente existirá un sólo grupo parlamentario compuesto por dieciséis diputados y cuya portavocía conservará Josep Antoni Duran Lleida, en la práctica se dividirán en los subgrupos de CDC y UDC, que trabajarán con “absoluta autonomía” y tendrán dos portavoces (Pere Macías por parte de Convergencia y Duran Lleida por Unió). La decisión se ha adoptado en una reunión de los diputados de los dos partidos de la que informaron Macias y Duran en ruedas de prensa distintas. Duran Lleida aseguró que no ha habido “ningún tipo de problema” para alcanzar el acuerdo, que se aplicará también en el Senado y que supone una reubicación de los diputados y senadores en sus escaños.
A partir de ahora, se repartirán los tiempos de las intervenciones parlamentarias en función de su representación. Las modificaciones adoptadas no afectan a las presidencias de comisiones (Duran preside la de Asuntos Exteriores) porque éstas son fruto de un acuerdo con PP y PSOE.
El portavoz institucional del grupo catalán reconoció que son conscientes “de la importancia histórica de este día” que pone fin al grupo de CiU tras 37 años de vida y trabajo parlamentario en el Congreso. “Yo no me alegro de esto, pero creo que ha habido un pasado positivo y que renegar del pasado en esta casa con tantísimas aportaciones que ha hecho CiU sería absurdo”, enfatizó Duran antes de declararse “orgulloso” del trabajo realizado por Convergencia i Unió durante todos estos años aunque haya llegado ahora el “momento de despedirse” y de defender cada uno sus planteamientos en sus programas y campañas.
En clave interna de UDC, Duran aseguró que tiene “ganas” e “ilusión” y que se siente “muy ligero” para poder contribuir a una campaña de su formación donde haga falta y asumir el reto de defender un proyecto que cree que tiene “gran espacio electoral”. Dijo que Duran no desaparece y que se siente fuerte para liderar a Unió. Afirmó que “hay mucha gente que se siente huérfana” y que está esperando a Unió. “Ante ese reto lo que no puedo hacer es esconder la cabeza. Estoy aquí para dar la cara y defender este proyecto al lado de quien sea”, añadió al ser preguntado por la posibilidad de que encabece una candidatura en las elecciones catalanas o las generales.
No quiso anticipar ningún nombre pero dijo que el secretario general del partido, Ramon Espadaler, le parece un excelente candidato a ser cabeza de lista el 27S.
Por su parte, Macias (que tendrá como portavoz adjunto a Carles Campuzano) ha hecho también un “balance muy positivo” del trabajo de CiU en el Congreso por su “extraordinaria actividad y eficacia” en la defensa de los intereses de Cataluña en el Estado central.
Los cambios anunciados hoy se formalizarán en el primer pleno extraordinario de julio.
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