Las pruebas de acceso a la universidad (PAU) finalizaron ayer con las materias de modalidad, como geografía, física, dibujo artístico, atemáticas, biología, griego… Con ello se cerró un paréntesis de tres días de exámenes. Superado el primer trance, los alumnos se enfrentan ahora al segundo que es conocer los resultados.
Será el 26 de junio a través de internet. y por primera vez, en el momento de la consulta de los resultados se podrá descargar el documento personal acreditativo de sus cualificaciones dotado con un código de seguridad de verificación. Y, como es tradicional, todos aquellos alumnos que hayan logrado una nota superior o igual a 9 recibirán una distinción de la Generalitat de Catalunya por su talento académico. Las PAU de este año se han desarrollado con normalidad. En Terrassa se matricularon 666 estudiantes de 18 centros públicos y concertados y se han examinado en el campus de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) en Bellaterra. El desplazamiento sigue generando incomodidad a jóvenes y docentes, los cuales se preguntan porque hay que ir a la UAB si Terrassa cuenta con siete escuelas universitarias -cuatro de la UPC- y dos equipamientos formativos como son el Vapor Universitari y el Campus Professional Vallaparadís.
De los exámenes de la fase común, el de lengua castellana es el que acaparó más titulares porque preguntó por la palabra "catáfora" (figura literaria que anticipa algo que aún no se ha enunciado o mencionado) y para muchos sonó muy rara y fue objeto de mofa en twitter.
En esta selectividad, los organizadores de las pruebas se han decantado por textos que hablaban del capital y los pobres (Muhammad Yunus), del nazismo ("El violí d’ Auschwitz", de Maria Àngels Anglada) y han recurrido también a los pensamientos a Platón y Nietzsche en Filosofía y al Memorial de Greuges de 1885 y a la guerra de Cuba en Historia.
