Todo salió a pedir de boca, el sábado, en la segunda edición de la Diada del Patrimoni de Minyons de Terrassa, desde la climatología, casi veraniega, hasta los castells, el resultado de los cuales no pudo ser más satisfactorio. Además del pilar de quatre caminat, que repitieron con éxito, los malva descargaron el tres de nou amb folre (tercero del curso), el quatre de nou amb folre y el nou de vuit (ambos, estrenos de esta temporada) para acabar con un pletórico pilar de set amb folre.
La jornada comenzaría a las cuatro de la tarde, con una veintena de ciclistas de todas las edades saliendo del local de los malva para desarrollar un itinerario por diversos lugares y edificios del patrimonio local, ante los que se paraban y se fotografiaban. A las seis de la tarde, en la plaza de la Creu Gran, arrancaba el pilar de quatre caminat que ya constituye el símbolo de esta singular Diada del Patrimoni, que ya está enraizando en el calendario casteller y cultural de nuestra ciudad (la animación y el ambiente que se vivió en esta segunda edición era mayúsculo). La construcción se desplazó sin problemas y con toda su espectacularidad por el puente de Sant Pere, hasta alcanzar la puerta de la Seu d’Ègara; esta vez, al contrario que el año anterior, pudo ser descargado a su llegada.
Cortas actuaciones de los Bastoners de l’Antic Poble de Sant Pere y Ball de Gitanes de Terrassa precedieron las de las colles castelleras (en su mayor parte, pequeños pilares) creadas en los institutos de la ciudad, dentro de los talleres del proyecto “Enfaixa’t”, impulsado por Minyons, y que acabaron con un “castell de germanor”.
La exhibición castellera comenzó a las siete de la tarde, ya en el interior del recinto de la Seu d’Ègara y entre una gran expectación generada por el ensayo del viernes por la noche. En la primera ronda, Minyons abordaron el tres de nou amb folre, que pese a esperar éste la subida de un contrafort, y ciertas dudas sobre si se llevaba adelante, fue descargado de manera muy segura.
Para la segunda ronda, Minyons se decidieron por estrenar, en lo que a esta temporada se refiere, el quatre de nou amb folre. Tuvieron con él un peu desmontado, cuando ya estaban los quarts colocados, pero en el segundo la construcción se completó “con solvencia, con un buen trabajo de los componentes de la colla para mantener las medidas en todo momento”, señalan fuentes de los malva. Este quatre de nou amb folre ha sido, además, el más tempranero de la historia de Minyons (nunca lo habían llevado a plaza antes del mes de junio).
En la tercera ronda, la Diada del Patrimoni propició otro estreno de la temporada: el nou de vuit. Con él demostraron Minyons “el buen trabajo hecho en los ensayos y el dominio de la estructura alcanzado el pasado año”.
La semana anterior, en su actuación en Sant Boi de Llobregat, a Minyons se les cayó el pilar de set cuando lo descargaban. El sábado, en la Seu d’Ègara, repararon el entuerto con un pilar de set impecable, que la colla califica de “muy parado, que sirvió para que se desvanecieran dudas” sobre la construcción. Cerrarían esta brillante actuación con cinco pilars de quatre.
Las dos colles invitadas también tuvieron buenas actuaciones en la Seu d’Ègara. Castellers de la Vila de Gràcia descargaron el tres de vuit (precedido por un peu desmontado), el dos de vuit amb folre y el quatre de vuit, esto es, que hicieron “tripleta de vuit”, y acabaron con un pilar de cinc.
Por su parte, los Capgrossos de Mataró realizaron sin problemas y demostrando un gran dominio de las estructuras el quatre de set amb pilar, el quatre de vuit y el cinc de set.
